Las células madre han dado paso a una nueva era en la medicina y han permitido avanzar en lo que conocemos como medicina regenerativa.
Las células madre son células indiferenciadas, o sea, que no vienen de un órgano específico como pudiera ser el hígado o el corazón. Además, tienen la capacidad de multiplicarse en dos células iguales o bien convertirse en la célula de un órgano o tejido adulto.
Las características de las células se amoldan para su uso efectivo en medicina regenerativa, principalmente en enfermedades degenerativas o enfermedades crónicas, dónde los órganos empiezan a perder su función.
Células madre y articulaciones
El área dónde se usa con muchísima frecuencia, y es cada vez más requerido por los pacientes, es en las articulaciones. Se puede tratar problemas de meniscos, regenerar cartílago, los ligamentos o los propios condrocitos, para regenerar su función y evitar el dolor.
Un órgano o tejido que no está perdido tiene el potencial de ser regenerado por medio de un tratamiento con células madre. A esto, justamente, se denomina “medicina regenerativa” y por eso es tan importante en la nueva era de la medicina.
Esto ya es posible, y muchos pacientes con problemas de artrosis, artritis, problemas de hombros, cadera o rodilla, por solo nombrar los más comunes, acuden a este tratamiento y coinciden en los buenos resultados obtenidos.
Además, no solo los resultados del tratamiento con células madre son sorprendentes, sino también la baja complejidad de la intervención. El tiempo de recuperación es muy corto. Al día siguiente de haberse sometido a la intervención, el paciente ya podrá volver a su vida normal.
¿En qué consiste el procedimiento de intervención con células madre?
En primer lugar, se deben obtener las células madre, que son sacadas del mismo paciente, o sea, son autólogas lo que aporta muchas ventajas añadidas.
Los lugares más comunes para extraerlas son la médula ósea o de la grasa abdominal.
En Adcure, en la mayoría de los casos, la extracción se hace de la grasa, porque tiene más células madre que la médula ósea, y además, por su sencillez de extracción, que requiere solo anestesia local.
Después de la extracción, se realiza la separación de las células madre para ser aplicadas al órgano receptor. Esta intervención dura entre una hora y hora y media, y como hemos dicho anteriormente, la recuperación es casi inmediata, ya que al día siguiente de la aplicación, el paciente ya puede volver a su vida normal.
¿Cuando comenzará a notas los resultados?
En cuanto a los resultados, se verán en su totalidad en un período de tiempo entre tres y seis meses, porque las células deben pasar a su estado de madurez. Sin embargo, algunos cambios podrán notarse desde el primer día.
La infiltración de células madres para casos complejos de problemas articulares ha dado resultados excepcionales, tanto en la recuperación de los tejidos como en el alivio del dolor, logrando así una mejora sustancial en el estilo de vida.
Si usted sufre problemas articulares, desde aquellos que afectan a sus rodillas, hombros, tobillos, caderas, columna, o bien problemas degenerativos tales como la artrosis y la artritis, nuestros profesionales en Adcure le harán y analizarán su historia clínica, para indicarle cuál es el tratamiento más adecuado para usted.
¿Existe otro tratamiento?
Para lesiones menos severas, con un tratamiento de Plasma Rico en Plaquetas (PRP), ácido hialurónico y/o citoquinas, su problema podría ser resuelto y solo en casos de más complejidad se le indicará un tratamiento con células madre.
Póngase en contacto hoy mismo con Adcure y nosotros le ayudaremos a recuperar la movilidad y su anterior estilo de vida.
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