Cirugía Para Las Orejas

¿Qué se te pasa por la cabeza al pensar en armonía fácil? ¿Se te ha venido a la cabeza algún aspecto que quieras mejorar de tu cara? Si en lo que has pensado es en las orejas, debes seguir leyendo este artículo.

Encontrarse con unas orejas mal alineadas o que sobresalen más de lo normal es un fenómeno que se produce en más personas de las que piensas. Esto afecta tanto a niños como a adultos y más de un 2% de la población se ve afectada, siendo muy habitual encontrarse en personas las orejas prominentes.

Esto puede ocasionar diversos problemas en la autoestima de las personas, por esa razón, queremos presentarte en qué consiste la otoplastia, o también conocida como cirugía para las orejas.

¿Qué es la otoplastia?

Antes de centrarnos en algunas de las cuestiones y aspectos relevantes de la cirugía para las orejas, queremos ponerte en situación para que sepas qué es la otoplastia. Esta técnica se utilizar para corregir la forma, posición o incluso el tamaño de las orejas.

Este tipo de intervenciones es escogida principalmente por aquellas personas que quieran conseguir una mejora en la armonía facial, y que de esta forma pueden corregir desde la molestia de tener las orejas más hacia fuera o en forma de asa, como posibles deformaciones causadas por accidentes o lesiones.

¿Cómo hacer una cirugía para las orejas?

Te lo vamos a contar de una manera muy resumida y sencilla, y no precisamente porque creamos que no vas a entenderlo, sino porque es un proceso complicado en el que mejor no entrar en detalles profundos.

Dependiendo del tipo de otoplastia que se vaya a realizar, el médico tendrá que realizar un determinado tipo de incisión, ya sea detrás de las orejas o bien en los pliegues internos de estas. Acto seguido, el procedimiento consistirá en la retirada de los cartílagos sobrantes y la recolocación de la piel y del resto de cartílagos.

Hecho esto, se cierran los cortes, se dan los puntos y listo.

¿Tiempo total? Aproximadamente dos horas

¿En qué consiste la cirugía para las ojeras?

Por lo que respecta al postoperatorio

Cuando la operación finalice, se te taparán las orejas con una venda para evitar daños en las mismas. Si notas molestias, no te preocupes ya que es algo normal después de este tipo de intervenciones.

Los primeros días procura no dormir de costado, ni rascarte, ni ejercer ninguna fuerza sobre las orejas. Y sobre todo no te quites las ventas, estas cintas ayudarán a que la otoplastia realizada consolide sus nuevas formas y se recuperen obteniendo una bonita armonía facial.

Pasamos unos días, el médico debe ser el encargado de eliminar esas vendas. En ese momento no te alarmes si ves que las orejas están hinchadas y es que es normal. Lo único que tienes que hacer es protegerlas durante la noche y aclarar con el médico el momento en el que pasará a eliminar los puntos de sutura.

A partir de ahí, ya podrás ir recuperando tu vida cotidiana poco a poco.

¡Alégrate, la otoplastia ha sido un éxito!

¿Qué riesgos puede presentar la otoplastia?

No te asustes, pero vamos a contarte algunos de los riesgos que se pueden presentar cuando se hace una operación de orejas.

En primer lugar, en muchos de los casos nos encontramos que tras la operación aparecen cicatrices detrás de las orejas. Aunque son permanentes, se encuentran detrás, por lo que no tendrás que preocuparte de que estén a simple vista.

Otro de los riesgos que en menor frecuencia aparecen, es el de la asimetría de las orejas. Durante la cicatrización es posible que el resultado no sea totalmente el esperado, sobre todo si previamente existía ya una asimetría, y es que es muy difícil corregirla por completo.

También deberás tener presente que tras la cirugía para las orejas notes que la sensibilidad de la piel ha aumentado considerablemente. Aunque con el tiempo esto suele remitir, hay ocasiones en los que se trata de algo permanente.

Puesto que nuestra intención no es asustarte, no vamos a seguir profundizando en los riesgos, aunque deberás conocer que se pueden encontrar desde problemas con los puntos hasta una sobrecorreción del problema.

Nuestra conclusión es que no debes alarmarte por este tipo de operación de orejas y es que tras saber qué es la otoplastia debe haberte quedado un poco más claro el proceso, por lo que no debes tener miedo. Es una operación que se realiza constantemente y que, aunque atañe una serie de riesgos, los beneficios son mucho mayores.

Después de la operación notaras una armonía facial donde tus otros rasgos faciales lucirán una imagen renovada y fresca.

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